Nos negamos a seguir haciendo de un individuo como Camps el centro de nuestra preocupación, nos negamos a lo mismo sobre Urdangarín, ya sabemos que hasta que Rajoy el lunes tome posesión de su cargo y empiece el baile sobre el nombramiento de sus ministros serán los temas de conversación preferidos, pero es que eso sería hacer crónica de tribunales, y entonces deberíamos pasarnos por las salas donde se juzgan a los maltratadores, donde se dictaminan los embargos, los ERE´s y demás, así que dejemos que los jueces hagan su trabajo lejos de nuestros ojos hasta que dictaminen sentencia para opinar sobre la misma y hasta entonces miremos donde siempre.

La UE hasta comienzo de Año Nuevo no dará muestras de existir salvo que las agencias de calificación les apetezca erigirse en protagonistas de los días navideños y entonces todos tengan que abandonar sus esplendorosas cenas para reunirse de urgencia y aparentar que tienen la situación controlada con declaraciones donde la palabra austeridad sea la destacada.

Los Mercados Bursátiles de momento están calmados, pero de esos no fiamos poco y nada porque cuando la calma parece reinar ellos se encargan de desatar la tormenta y desequilibrarlo todo, haciendo que las Bolsas se desplomen y las Primas de Riesgo se eleven por encima de lo soportable. Esperemos que las cenas y comidas de estos días les mantengan distraídos y nos dejen tranquilos a los demás.

Al que de momento le toca aparentar que trabaja es a Rajoy, le toca ir reuniéndose con los diferentes grupos políticos con representación parlamentaria para recordarles a todos que ahora el “amo” de todo es él y que tiene la suficiente fuerza en ambas Cámaras como para hacer lo que se le vengan en gana si se ponen muy tontos. Por cierto Amaiur que no aspire a estrechar la mano del actual Presidente in Pectore aunque de cosas más inverosímiles hemos sido testigos.

La CEOE y los Sindicatos andan que si que no por el asuntillo de los “minijob” ese nuevo tipo de contratación que quiere instalar la Patronal y ante él que los sindicalistas se encogen de hombros mientras el personal lo vemos como un contrato esclavista; tenemos que tener en cuenta que desde hace tiempo el sindicalismo de este país se ha olvidado de luchar por los derechos de los trabajadores escudándose en la crisis y la Patronal se frota las manos porque con Rajoy en el poder van a hacer de su capa un sayo.

Como dice el Rey “vienen tiempos muy duros” y que lo diga Majestad con un panorama como el actual es mejor seguir hablando de los trajes de Camps y de las andanzas financieras de su yerno.

Galiana