Al Gobierno no le cuadran las cuentas y el desaguisado es de tal calibre que no le ha quedado otra que decirle a la UE que los números ante ella presentados en febrero no eran más que una milonga, una engañifa, una estafa, un juego de manos entre fulleros del mismo partido que por fin ha salido a luz y por el que nos merecemos el castigo que a bien tengan que imponernos Bruselas a través de los dichosos Mercados Bursátiles.
CCAA como Madrid, Valencia o Castilla y León, todas ellas gobernadas desde hace años por el PP, han resultado ser unas tramposas de mucho cuidado. Aguirre, Fabra o Juan Vicente Herrera escondían en la manga no un as sino un montón de facturas impagadas fruto de “una fiesta” que ahora debemos pagar entre todos “a escote” como de costumbre.
Suponemos que a Rajoy el “siete” hecho por Madrid en el déficit nacional debe ocasionarle algún que otro quebradero de cabeza dado que se vanaglorió, en público y en privado, de la perfección de la gestión de Aguirre llegando a ponerla como ejemplo a seguir para el resto de CCAA.
Obviando que el ser fullero es un valor en alza avalado por Moncloa, queremos imaginar que en el interior de Rajoy el verse traicionado por Aguirre de este modo debe ocasionarle cierto sentimiento cercano a la vergüenza, pero tal y como se las gasta el Presidente dudamos mucho que dicho concepto tenga lugar en su vocabulario.
Como es lunes y queremos empezar la semana con buen pie vamos a admitir, qué ya es mucho admitir, que Rajoy siente cierta dosis de bochorno al tener que asumir que deberá ser emplumado con brea como resultado de ser el más fullero de todos los Presidentes que hemos tenido desde que disfrutamos de esta etapa en democracia, pero si hubiera controlado más a “los suyos” en lugar de estar jugando a culpar de todo “a la herencia recibida” tal vez, solo tal vez, la penitencia hubiera sido menor.
Llegados a este punto y viendo que quien más quien menos es un tramposo de tomo y lomo sin importarle traicionar hasta a “los suyos” con tal de mantenerse en el poder, nos van a perdonar la ordinariez pero le recomendamos a Rajoy cierta frase que aprendimos hace años de boca de alguien que de política entiende y mucho “a jugar con jugadores y a follar con putas”
Galiana