Meses de ensayos, meses preparando el texto, intentando dar con la banda sonora ideal, buscando a los actores y actrices que encajen a la perfección en el papel; por fin ha llegado el momento del gran espectáculo.
Desde la medianoche se ha levantado el telón para representar la función de forma ininterrumpida e improrrogable hasta el próximo 22 de mayo. La obra se titula la campaña electoral a las elecciones municipales y autonómicas; su primer acto ha sido la tradicional pegada de carteles por parte de los líderes nacionales de las diferentes formaciones políticas.
Desde hoy hasta el próximo sábado 21, jornada de reflexión, escucharemos los himnos de los diferentes partidos políticos por las calles a modo de soniquete repetitivo hasta la saciedad; nos invitarán a mil y un mítines a los que asistiremos o no; nos bombardearan con los más variopintos programas electorales en su mayoría imposibles de llevar a la práctica; nos abrumarán con promesas que nunca se cumplirán; las farolas decoradas con fotografías de líderes locales y autonómicos nos provocarán empacho visual.
¿Cuáles son las estrategias de los partidos?
En un principio en el PSOE intentan mantener su poder territorial, lo cual no está nada claro a la vista de las encuestas del CIS donde peligra el bastión de Castilla-la Mancha y de Extremadura después de décadas de poder hegemónico. Barcelona enclave cargado de gran simbolismo pasaría a manos de CIU tras 32 años. Los socialistas se abonaron a la debacle hace tiempo, como así lo demuestran los sondeos, pero aún así tratan de evitar el desanimo entre sus filas hablando de una hipotética sorpresa el próximo 22. La crisis y el modo de gestionarla por parte del Gobierno ha hecho mucho daño, la renuncia de Zapatero no es suficiente y el no tener claro quién será su sucesor pesa demasiado entre los votantes de la izquierda.
El PP pretende convertir los comicios municipales y autonómicos en un ensayo de cara a la convocatoria de 2012 y con el objetivo de salir lo suficientemente favorecido como para provocar adelantar las elecciones generales al próximo otoño. Venden que los socialistas son incapaces de sacarnos de la crisis, pero siguen sin aportan ideas o soluciones que nos hagan salir de la misma y tampoco tienen la receta mágica para crear empleo; eso sí se frotan las manos porque según el CIS la trama Gürtel no les pasará factura.
Existen más partidos que concurren a estos comicios a pesar que la sociedad se empeña, desde hace tiempo, en conducirnos a un bipartidismo.
Las formaciones políticas minoritarias (incluida la coalición Bildu por decisión del Tribunal Constitucional que revoca la sentencia del Tribunal Supremo) no esperan un triunfo espectacular, sus pretensiones tienen menor recorrido, se conforman con arañar algún que otro concejal en municipios de cierta relevancia, o bien mantener el número de diputados en el parlamento autonómico correspondiente, les satisface la idea que alguno de los partidos mayoritarios necesite de su apoyo para gobernar una localidad o una autonomía y eso les de notoriedad.
Como cada cuatro años ha dado comienzo el espectáculo electoral, que todos lo disfrutemos, lo vivamos y sepamos lo que hacemos al depositar nuestro voto el día 22 de mayo.
Galiana