
Llegamos al final de Madre Tierra
Espero que os haya gustado este relato
Volvemos a vernos pronto por aquí
Año 22 DP
Como balance, 22 años después de la 1° Purga, podría decirse que la generosidad de la Madre no tiene límites. Desde el gobierno mundial, con los Guerreros por la Tierra, al frente del ministerio por la Depuración, todo había funcionado con bastante diligencia. Los proyectos para el desarrollo sostenible, otrora abandonados, surgían y de la mano de científicas y ecologistas fueron dando sus frutos. Habían cosas como un combustible, fruto de un árbol, en su proceso de crecimiento, absorbía toda clase de pesticidas del suelo y sus flores olían a vainilla El trasporte colectivo de todo el mundo ya funcionaba con él.
La población mundial, en general, aceptaba de buen grado los pequeños cambios y a la postre, los grandes, eran incluso demandados.
Había detractores del nuevo orden pero se ocultaban. Los desposeídos de poder aniquilados dejaron tras de sí, una fina estela de personajes siniestros que esperaban su momento. El ministerio velaba para controlar y sofocar posibles alzamientos. Quien sabe si una segunda Purga fuera algún día necesaria.
«Madre Tierra, generosa, das cobijo y provees de alimentos a tus habitantes. Solo necesitas paz y equilibrio.
Velaremos con nuestra vida, tu eterna armonía y pasará el testigo de nuestras manos a otras de más valía, por generaciones venideras y por los siglos.»

