Rojo carmesí

Aquella boca con su labial carmesí… ¡La de veces que fue mía! ¿Qué estoy diciendo? Jamás, nunca fue mía, ni de nadie.

En lo que a mí atañe durante un tiempo fui afortunado, al ser elegido por su mano, para disfrutar de ese rojo pasión que ella añadía a sus ya de por sí sensuales labios.

A cambio fui un mísero esclavo de todos sus deseos.

Galiana

Acerca de Galiana

Escritora, creativa
Esta entrada fue publicada en Galiana, Galiana Relatos, Literatura, Microrrelatos y etiquetada , , , , . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s