¡Hola a todos! Hoy os traigo el tercer episodio de los consejos de salud en Navidad y en este caso quería centrarme en lo relativo al consumo de drogas, legales e ilegales, durante el periodo de pascua. Los eventos navideños están muy marcados por el ambiente festivo en la mayoría de los casos. Ya hemos hablado de los abusos que nos permitimos con la comida, pero en muchos casos uniremos a ellos el abuso de drogas.

Antes de que os volváis locos, quiero destacar que el alcohol y el tabaco, a pesar de su mayoritaria aceptación social no dejan de ser drogas por definición, y que por tanto al hablar de drogas en Navidad no tenéis que pensar automáticamente en tu cuñado con una jeringuilla en el brazo mientras coméis en año nuevo.

En primer lugar quería hablaros del alcohol, ya que ejemplifica perfectamente el abuso que hacemos durante las Navidades. Todos los eventos como comidas, cenas y fiestas nocturnas suelen ir aparejados de cervezas, vino, copas y “digestivos”. Sin tener yo intención de demonizar nada, creo que huelga decir que todos sabemos perfectamente cómo se incrementa exponencialmente el consumo de alcohol en estas fechas, y mi consejo en este sentido es que seamos capaces de reflexionar por un momento si de verdad es necesario consumir drogas en un ambiente familiar en general o cuántas ganas tenemos de verdad de tomarnos esa segunda copa después de una comida o esa quinta a las 6 de la mañana. Dicho esto, para la resaca lo mejor es descansar y beber agua, si es posible mientras consumimos el alcohol.

En segundo lugar, quería hablar del tabaco, que aunque no seamos capaces de relacionarlo directamente con la Navidad, sí que podemos darnos cuenta de cómo entrar en ese estado mental de “venga que son fiestas” nos empuja muchas veces a fumar mucho más de lo habitual. Si fumáis, intentad no incrementar el consumo durante estas fechas, sobre todo con la dificultad añadida de cómo el tabaco suele consumirse aparejado al alcohol y otras drogas. En resumen, si ya de por si es un hábito tóxico, incrementarlo en estas fechas no es nada más que otra piedra más que nos cargamos a la espalda.

Por último, en Navidad el consumo de drogas ilegales se multiplica y por tanto los riesgos para nuestra salud. Aparte del típico eslogan de “Di no a las drogas” os invito a que en caso de hacerlo, consumáis responsablemente y sin perder de vista las posibles consecuencias a corto y largo plazo.

Ramón Valenzuela