Sé que aunque aquel día, en el tren, yo tenía mi observación puesta en espera, como acostumbraba, para recrearme en el mundo que me rodea, me sorprendió más que de costumbre, una escena inusitada. Eran un grupo de criaturas pequeñitas, pertrechadas para la excursión de sus vidas.

¡Su asombro y felicidad por el viaje, me hizo sentir fascinada!

Todo era risa y algarabía… y por un momento me sentí trasportada, a aquel hermoso mundo donde la felicidad hace parada.

@nataliadocampo