Es viernes y tras los resultados de Escocia toca plantearnos muchas cosas, pero eso lo dejaremos para el fin de semana. La reflexión es un lujo del que nadie debería prescindir, y en ello incluimos a Rajoy, Mas y compañía, así que un poquito de sosiego que nunca viene mal.

La semana ha estado marcada por muchos y variados temas. La muerte del banquero Emilio Botín y la Presidencia del Santander en manos de su hija, el fallecimiento de Isidoro Álvarez y que El Corte Inglés esté ya dirigido por su sobrino, los amagos de Gallardón por irse de la política si su Ley del Aborto no sale adelante, las peleas entre Más y Rajoy por la cuestión de Catalunya… bla, bla, bla

Por encima de todos estos temas hay uno que nos retrata como un país de bárbaros, crueles, salvajes y todos los sinónimos relacionados que queramos añadir a este calificativo.

Los españolitos somos morbosos, eso no hay quien nos lo quite, pero el maltrato animal es una brutalidad que debería estar prohibida por Ley. La laceración del Toro de la Vega nos degrada como personas tanto a quienes lo llevan a cabo como a quienes lo consienten.

El Alcalde de Tordesillas, con indiferencia del color político que sea (el actual es socialista) debería prohibir sin más esta atrocidad. ¿Qué pierde votos él y su partido? Ahh!!! que eso es un motivo de peso más que suficiente para seguir avergonzándonos delante del mundo por ser unos salvajes primitivos que se divierten haciendo el bestiajo a mansalva contra un animal.

Respecto de lo que dicen las encuestas, ésas que son más falsas que las peleas de pressing catch, relativas a la intención de voto va a ser que el personal está hasta el moño que sean la base sobre la cual se asientan los gobernantes de este país para dictar las leyes.

Estamos en precampaña electoral para las municipales y las autonómicas y no toca hacer o decir nada que reste votos. Políticos de turno, si ésa es la forma en la que tienen de ser servidores públicos váyanse directamente a su casa, por no decir a la mierda, que es donde deberían irse muchos de estos “cagapraos” que no tienen lo que hay que tener para enfrentarse a imbéciles catetos pueblerinos incapaces de distinguir la crueldad contra un animal de un espectáculo.

José Antonio González Poncela, Alcalde de Tordesillas, no ha tenido los arrestos suficientes como para eliminar de un plumazo el Toro de la Vega. El Presidente de Castilla León, Juan Vicente Herrera, podía haberlo hecho y tampoco ha tenido lo que hay que tener. En última instancia hasta Moncloa podía haber intervenido, pero están ocupados en otros menesteres que sí dan votos.

Si alguien ha echado en falta un enlace al Toro de la Vega lo sentimos que no vamos a contribuir a promocionar esta animalada y menos con imágenes que pueden herir la sensibilidad de los lectores de esta columna.

Buen fin de semana de reflexión para todos, que lo de Escocia va a tener consecuencias a corto, medio y largo plazo.

Galiana