
Frases que tuvieron su momento y han caído en desuso aunque siguen plenamente vigentes: No se le puede poner puertas al campo.
Y es que, por mucho que el hombre transforme el entorno que le rodea, la naturaleza es la naturaleza y al final encuentra camino para seguir a lo suyo.
Con el debido permiso (o sin él) de los apocalípticos seguidores de Greta.












