
Pacientes, aguardando en medio de la repentina penumbra provocada por cualquier tormenta de verano, oscurecido el cielo un rato más o menos largo en medio de agosto.
Iluminarán la Plaza Mayor de Madrid cuando toque, ya de noche.
Pero aún no.

@joseraigal












Bellas…únicas, como siempre al acecho del atardecer cerrado. Un abrazo,
Me gustaMe gusta
La luz y las tinieblas tienen esa dualidad enigmática que atrae como un abismo, las mismas que el cielo y el infierno. Otro abrazo.
Me gustaMe gusta