
Parecerse a un Zigurat no se parece, pero en medio de un Puente de Vallecas masivamente urbanizado por casas de cuatro o cinco alturas como máximo, un edificio como el de la fotografía llama la atención, mastodóntico e impresionante como él solo.
Algunos edificios ganan carácter y singularidad por sí mismos y, también, por el entorno que les rodea.

@JoseRaigal












Espléndida ésta foto. Me ha gustado
Me gustaMe gusta