Se nota que estamos en campaña electoral. Los candidatos sacan sus mejores galas, se ponen de largo para ver cómo nos la meten doblada una vez más. Vale, es lunes y no podemos empezar la semana de esta guisa, pero es que es todo tan sumamente vomitivo…
El Gobierno y Arias Cañete presumen que gracias al austericidio impuesto a golpe de Decreto Ley vamos saliendo de la crisis. Ante esta afirmación solo nos resta pensar que van saliendo los de siempre, aquellos para los que la crisis ha consistido en reducir la ingesta de caviar de 7 días a la semana a 3, el resto estamos mucho peor que antes.
Por si escuchar a Cañete y compañía sacando pecho por lo bien que lo están haciendo, haciendo gala de la recuperación económica y demás, no fuera como para salir corriendo, que lo es, tenemos a una Elena Valenciano como ejemplo claro de desnorte total y absoluto.
Valenciano podría meterle los dedos al Gobierno y a las políticas de derecha que tan de moda están en Europa, podría hacer hincapié en como el austericidio ha conseguido que la clase media sea asesinada con total impunidad sin que nadie haya hecho nada por salvarla, podría… Podría hacer muchas cosas, pero es un claro ejemplo de no saber estar, de no saber ni por donde se anda, de… del fracaso total que es el PSOE en este momento.
En cuanto al resto de partidos se dedican a ver si los dos grandes se la pegan, a proclamar a quien quera escucharles que estas elecciones marcaran el fin del bipartidismo en este país, siendo estos postulados la base de su discurso electoral.
La ciudadanía lo tiene complicado y tendrá que hacer una enorme reflexión para saber a quien tiene que votar porque no es lo mismo el jabón que el hilo verde aunque todo sea para la ropa. Debemos pensar que Bruselas no nos pilla tan lejos como creemos, que está a tiro de piedra, que cuando allí estornudan nosotros pillamos una neumonía del carajo.
La cuestión es compleja y hay que mirar muy bien en todas direcciones.
De un lado tenemos una derecha rancia, retrograda, que iza la bandera del austericido como forma de vida con todo lo que ello conlleva y cuyas consecuencias estamos padeciendo en nuestras carnes, un PSOE que no sabe como quitar los imanes a la brújula para volver a encontrar el norte, y otras formaciones políticas que se dedican a tratar de pescar en las aguas revueltas.
Nos esperan 15 días tediosos, llenos de mentiras, de promesas que jamás se cumplirán, de falsedades, del “y tú más”, y si la cosa se complica sacarán a Urdangarin a la palestra, que para estos casos la Casa Real es perfecta para distraer la atención del personal.
Es lunes, estamos en campaña electoral, que el show sea lo menos vomitivo posible es lo único que podemos esperar de aquí al 25 de mayo.
Galiana












Totalmente de acuerdo, pero lo que si que es cierto es que tenemos que VOTAR.
Me gustaMe gusta
Mal haríamos si no votamos
Me gustaMe gusta
Después de escuchar las palabras de aquél que está «en la misma dimensión que el Che y jesucristo» según la cadidata del PSOE dejando entrevér un hipotético pacto PP PSOE queda patente que ambos partidos ven peligrar el bipartidismo, que es lo que les da de comer y han de perpetuarlo a toda costa. Puede que sea por ello por lo que el uno nos presenta un candidato desgastado a priori, sin mucho «empuje» que pide el voto con la boca pequeña y el otro, además de no recurrir ni a la cartelería habitual, una candidata que, personalmente no creo que llegue (como todo el espectro político actual, por desgracia).
Visto el desprecio con el que se dirijen a nosotros y el interés por conseguir que las cosas no se muevan, por favor, el día de la elecciones, votad. A quien queráis pero no os quedéis en casa. Es ya cuestión de higiene política.
Me gustaMe gusta