![]()
Os muestro una preciosa fotografía de una niña llamada Ana Yun a la que le encanta la Navidad, y sobre todo decorar su casa con adornos de todo tipo por todas partes. Observar a un niño en Navidad desde luego que hace sonreír a cualquiera, el simple hecho de verle colocar una bola en su árbol navideño y contemplar su cara es ya un regalo que hay que saber apreciar, así que yo os propongo que al menos por un día, solo un día, intentéis sentiros como cuando teníais no más de diez años por estas fechas, y estoy seguro que será un día para recordar historias, y sonreír como el niño pequeño que todos llevamos dentro.

Carlos T. Piriz











