Las declaraciones de Ansón sobre como metió baza para acosar y derribar a Felipe González  no vienen sino a confirmar el matrimonio secreto y medio discreto existente entre la política y los medios de comunicación.

Seguros estamos que hoy no vamos a hacer muchos amigos con lo que vamos a expresar en este espacio pero es que los matrimonios de conveniencia nunca han sido santo de nuestra devoción y algunas declaraciones dejan en evidencia situaciones que nunca deberían existir.

Vaya por delante el entonar un mea culpa pues en alguna que otra ocasión hemos sido cómplices en esto de acosar y derribar al político de turno, consiguiendo gracias al manejo de nuestras palabras ver la caída de quien no queríamos estuviera en el poder y aupando al tiempo al líder de otro partido político, quien jamás nos pago prebenda alguna por ello.

Una vez hecha la confesión sobre esto de la manipulación donde ninguno podemos lanzar la primera piedra, ha llegado el momento de observar como los medios de comunicación al igual que la política el bipartidismo es quien gobierna los designios de la sociedad.

La crisis económica que todos padecemos ha hecho que el bipartidismo se rompa porque sin dinero para mantener a los mercenarios, que son los que realmente sostienen todo el tinglado, ha dado paso a que un «gran capo» todo lo controle aunque los demás mordisquean como buenamente pueden el pastel.

Este “gran capo” ha hecho una apuesta muy fuerte dada su enemistad rayando lo personal con el candidato socialista. Este todopoderoso de la comunicación no quiere a Rubalcaba ni en los cromos, y dado que no hay manera de desacreditarle y meterle en la cárcel al estilo Corcuera y compañía, y mira que lo ha intentado, ha trazado la jugada maestra de aupar, sin ningún tipo de pudor, a UPyD, que conste que Rosa Díez tampoco es la niña de sus ojos y que con ella ha tenido sus más y sus menos. Los motivos que tiene para todo esto se basan en su inseguridad de que Rajoy no la vaya a pifiar en el último momento como acostumbra, y Rubalcaba se vea en Moncloa contra todo pronóstico, esa es la verdadera razón y no otra por la cual UPyD se haya convertido de la noche a la mañana en ese as medio escondido en la manga.

Nombres, nombres, aquí todo el mundo quiere nombres, pero no hace falta porque quien más quien menos de sobra sabe que tras la desaparición del “Gran Padrino” y el hundimiento de todo su grupo por las disputas de la herencia y que esta crisis que le está dejando hasta sin recursos para pagar las nóminas de sus trabajadores, el trono fue ocupado por el otro «Gran Capo».

Todo esto que parece como muy complejo es sencillo de explicar, no tenemos más que observar las portadas de los medios de comunicación. Como se suele decir quien tenga ojos que vea, porque la verdad de cuanto decimos está cada mañana en las portadas de los medios, solo hay que tener ojos para ver.

Galiana