La política de este país siempre ha sido enrevesada, nada clara e históricamente hemos sido testigos de cómo se forjan extraños compañeros de cama dando lugar a situaciones inverosímiles.

Los socialistas fueron vapuleados el pasado 22M nada más y nada menos que por dar un giro hacia la derecha en sus políticas económicas y sociales. En el PP mientras tanto se frotan las manos porque cuanto más a la derecha vaya Zapatero más crece el descontento entre los votantes de izquierdas y más poder consiguen ellos.

Es evidente que un votante del PSOE disconforme con la política de su partido no va a jurar fe ciega a Rajoy, así pues a la hora de votar y sin traicionarse demasiado así mismo confiará, aunque sea con la nariz tapada, en IU o en UPyD. Esto explicaría el batacazo de los socialistas y el aumento de los otros dos partidos.

El 22M no otorgó el puesto directo a muchos candidatos a la Alcaldía o a la presidencia de las CCAA, así que tanto PSOE como PP se veía en la obligación de pactar si quería hacerse con el gobierno y la llave estaba en manos de UPyD y de IU.

Tanto uno como otro partido siguieron la máxima de Warhol: «En el futuro todo el mundo será famoso durante quince minutos. Todo el mundo debería tener derecho a 15 minutos de gloria.». Desde las direcciones generales tanto de IU como de UPyD se emitieron declaraciones sobre la idea de no pactar, pero sin olvidar las directrices del artista neoyorquino.

Los de Rosa Díez siempre hablaron de abstenciones y cierto es que más de un Alcalde popular ha llegado a obtener el bastón de mando gracias al “me da lo mismo” de este partido, basta con recordar el caso de Getafe.

IU de repente se vio siendo la bisagra sobre la continuidad de Fernández Vara al frente del Gobierno extremeño, y ver caer el bastión socialista de Extremadura da para más de quince minutos de gloria. Cayo Lara líder de la formación de izquierdas, o eso parece, dio orden de no pactar con el PP si eso conllevaba darle el gobierno a la derecha, pero “los suyos” o no le escucharon o van por libre.

Los extremeños castigaron a Fernández Vara por la política de derechas de Zapatero y verán como el refrán de “si no quieres caldo, toma dos tazas” se va a cumplir sin remisión, reprobaron la política de derechas del Gobierno de Zapatero y ahora la van a sufrir en su carnes.

La política hace extraños compañeros de cama, esperemos que los extremeños y los habitantes de algún que otro municipio no se arrepientan demasiado de haber provocado este singular matrimonio.

Galiana